QUÉ HACEMOS!!!

La pobreza extrema en las comunidades es uno de los factores que favorece la presencia del insecto transmisor. La falta de conocimiento por parte de las autoridades locales, los profesores de las escuelas, los moradores de las comunidades e inclusive el personal médico que atiende en estas áreas también se  ve afectado por la falta  de información, lo que hace, que no puedan detectar menos aún diagnosticar a las personas infectadas. Al no existir tratamientos efectivos la mejor manera de prevención y control es mediante la educación, estas razones han hecho necesario el desarrollo de un “Programa piloto de Educación para la Prevención y Control de ECh”, ya que esta enfermedad es un problema no solo a nivel epidemiológico, clínico, sino también educativo, social y psicológico